Fotografía de Rafael González Perea
Agricultura, Ingeniería | Córdoba

Rafael González Perea

Departamento

Departamento de agronomía. Área de ingeniería hidráulica.


Grupo de investigación

Departamento de agronomía. Área de ingeniería hidráulica.

Sobre mí

Nací el 27 de mayo de 1989 en Córdoba. En el periodo 1995-2001 realicé los estudios de infantil y primaria en el Colegio Vista-Alegre. Los estudios secundarios y bachillerato los realicé en el I.E.S. Séneca en el periodo 2001-2007. En el año 2007-2008 comencé mis estudios en la E.T.S.I.A.M., consiguiendo el título de Ingeniero Agrónomo en 2012. En el año 2010-2011 me incorporé en el área de ingeniería hidráulica con la Beca ‘Iniciación a la investigación’. En el curso 2012-2013 he realizado el Máster en Proyectos y Gestión de Plantas Agroindustriales unido en todo momento con el área de ingeniería hidráulica. Actualmente soy doctorando en esta misma área.

Líneas de investigación

Optimización del binomio agua y energía en comunidades de regantes.

Resultados destacables

En redes de riego a la demanda es sumamente necesaria una gestión eficaz de los puntos críticos que mejoran la eficiencia global de la infraestructura de riego con costes mínimos. Así, mediante una gestión eficaz de estos puntos críticos es posible reducir el consumo energético de toda una comunidad de regantes. La cuantificación de esta medida de ahorro depende de numerosos factores como tamaño de la comunidad de regantes, gestión de la misma, topografía, etc, pero puede implicar ahorros económicos de varios miles incluso cientos de miles de euros.

Vocación

Comencé en el año 2010-2011 con la adquisición de una beca de iniciación a la investigación de 2 años de duración.
El mundo de la investigación, concretamente en eficiencia de agua y energía es, actualmente, el campo que más me interesa y en el que creo que hay mucho trabajo por desarrollar. Es por esto entre otros motivos por lo que actualmente sigo en investigación.

Deseo científico

Actualmente el mayor deseo científico es que los altos cargos de este país se conciencien de la importancia de la ciencia y la investigación para el desarrollo de un país, así como no dejar ‘escapar’ a los jóvenes investigadores muy bien formados aquí.

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