Fotografía de José Becerra Muñoz

José Becerra Muñoz

Departamento

Instituto de Criminología
Área de Derecho Penal


Grupo de investigación

Instituto de Criminología de Málaga
Área de Derecho Penal

Sobre mí

Estudié Derecho y Criminología en la Universidad de Málaga y soy desde 2004 profesor e investigador tanto en el Área de Derecho Penal de la UMA como de su Instituto de Criminología.
En 2010 terminé mi tesis doctoral. En ella pretendía dar respuesta a dos preguntas: ¿cómo se hacen las leyes penales? y ¿qué deberíamos cambiar para hacerlas mejor?
Actualmente soy parte del Observatorio de la Delincuencia, un grupo de investigación dentro del Instituto de Criminología que elabora informes para sacar a la luz la realidad y los datos relacionados con el mundo de la criminalidad (www.oda.uma.es).
Asimismo, soy parte de un grupo en el Área de Derecho Penal que está realizando una investigación sobre la respuesta que se da a la delincuencia en diferentes países y la relación que esto tiene con la exclusión social.
También soy uno de los promotores de dos redes de investigación sobre política legislativa penal, uno español y otro europeo.
Para avanzar en mis investigaciones y seguir aprendiendo de los mejores he realizado dos estancias de investigación: en 2006 pasé seis meses en Cambridge (Reino Unido) y en 2012 estuve un año en Nueva York (EEUU).
He dado ponencias en diversos congresos nacionales e internacionales, en lugares como Chicago, Nueva York, Ámsterdam, Budapest, Vilna (Lituania), Barcelona, Madrid, San Sebastián, Ciudad Real o Salamanca.
Por último, he fundado el Aula de Investigación Novel de la Facultad de Derecho de Málaga y soy miembro de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Investigación Criminológica.

Líneas de investigación

Política legislativa penal
Política criminal y exclusión social
Menores de edad y administración de justicia
Tribunales penales
Prisiones españolas

Resultados destacables

Los que investigamos en Criminología y Derecho no elaboramos productos, como medicamentos o nuevos materiales industriales, sino que desarrollamos teorías y estudios con la intención de que influyan en la realidad política y social. Un libro puede no parecer un resultado muy espectacular pero si su contenido se toma como base para elaborar la nueva ley contra la violencia de género, qué duda cabe de que se trata de una investigación con un gran impacto.
Por mi parte, en los últimos cuatro años he publicado un libro “La toma de decisiones en política criminal: bases para un análisis multidisciplinar” y, junto con otros tres compañeros, he participado en dos más: “Justicia y delincuencia. El peso del delito en las estadísticas judiciales” y “Realidad y política penitenciarias”.
El artículo más importante de los que he publicado recientemente se titula “La toma de decisiones legislativas penales” y se publicó el año pasado en la que, según el ranking científico más prestigioso: el Journal Citation Index (JCR), es la mejor revista jurídica española: la Revista Española de Derecho Constitucional.
Parte de mis planteamientos en materia de política legislativa penal han sido difundido como material de trabajo en la comisión sobre la calidad de la legislación convocada por el Ministerio de la Presidencia.

Vocación

En el mundo de las ciencias sociales y jurídicas, la investigación y la ciencia están muy relacionadas con dos factores esenciales: la libertad de pensamiento y la contribución a un mundo mejor en el que convivir.
Desde ese punto de vista me interesé desde que empecé mis estudios universitarios por el fenómeno delictivo. Creo que se trata de un ámbito que tiene dos niveles, uno relacionado con nuestro lado más morboso: el delincuente, la víctima, la escena del crimen, etc. Y otro, mucho más profundo, en el que uno se da cuenta de cómo organizamos nuestra respuesta ante la delincuencia y los efectos demoledores que eso tiene en muchos sectores de nuestra sociedad. Una vez que te percatas de que el código penal es un arma que se puede dirigir contra unos grupos sociales u otros, ya no ves la delincuencia con los mismos ojos.
Además de eso, la verdad es que no hay muchos lugares en los que uno pueda dedicarse profesionalmente a indagar en la realidad delictiva con libertad. Todos queremos vivir en un mundo más seguro, y también más justo, y ese es un objetivo ambicioso que nos enfrenta con problemas de los que no sabemos tanto como creemos.

Deseo científico

Mi deseo es que, al igual que ocurre en muchos países, cuando alguien tenga que redactar una norma, un plan o una política relacionadas con la delincuencia diga: ¿por qué no le preguntamos a alguien que lleve estudiando estos problemas un tiempo?

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