Carmen M. Toscano Fuentes
Universidad de Huelva
Filología Inglesa.
Grupo de investigación
ReALL (Research in Affective Language Learning).
Sobre mí
Profesora Contratada Doctora en la Universidad de Huelva, con una sólida trayectoria docente e investigadora en el ámbito de la didáctica de lenguas extranjeras. Ha impartido docencia durante más de 18 años en las etapas de Educación Infantil y Primaria, lo que le ha permitido desarrollar una perspectiva práctica y profunda sobre los procesos de adquisición lingüística en edades tempranas.
Ha desempeñado funciones como asesora de formación en el Centro del Profesorado (CEP) de Huelva e Isla Cristina, colaborando en el diseño y la implementación de planes de formación permanente del profesorado, especialmente en el área de enseñanza de idiomas, metodologías innovadoras y recursos didácticos basados en la música y la inteligencia emocional.
Su línea de investigación se centra en la enseñanza y el aprendizaje del inglés como lengua extranjera, con especial interés en el uso de metodologías activas, el enfoque comunicativo y la integración de la música como recurso facilitador del aprendizaje. Ha impartido numerosos cursos de formación docente sobre el uso de la música en el aula de idiomas, contribuyendo a la mejora de la competencia lingüística y la motivación del alumnado.
Es miembro del grupo de investigación COIDESO y del grupo REALL (PAIDI-HUM657), donde colabora en proyectos de innovación educativa y producción científica centrados en la multialfabetización, la interculturalidad, y la aplicación de las inteligencias múltiples en contextos educativos diversos.
Líneas de investigación
Enseñanza de inglés a través de recursos multimodal.
Resultados destacables
Mis investigaciones se centran en el ámbito de la enseñanza y el aprendizaje de idiomas, con un enfoque especial en el impacto que tienen los recursos multimodales, las inteligencias múltiples y las metodologías activas en el desarrollo de la competencia lingüística. A lo largo de mi trayectoria investigadora, he buscado establecer puentes entre la teoría y la práctica docente, explorando cómo factores como la motivación, la emoción y la creatividad influyen directamente en el proceso de adquisición de una lengua extranjera.
Uno de los ejes temáticos más relevantes de mi producción científica ha sido la relación entre la música y el aprendizaje de idiomas. En este sentido, destacan especialmente dos de mis publicaciones más citadas, que han contribuido de forma significativa al debate académico en este campo:
Melodies that help: The relation between language aptitude and musical intelligence (193 citas), donde se analiza cómo la inteligencia musical puede potenciar la aptitud lingüística y facilitar la adquisición de estructuras fonológicas y léxicas en lengua extranjera.
La música como herramienta facilitadora del aprendizaje del inglés como lengua extranjera (188 citas), un estudio empírico que demuestra cómo el uso pedagógico de la música favorece no solo la retención de vocabulario y estructuras gramaticales, sino también el desarrollo de habilidades comunicativas, la motivación y la autoestima del alumnado.
Ambas publicaciones se han convertido en referentes dentro del campo de la didáctica de lenguas extranjeras y han sido utilizadas por docentes e investigadores de distintas partes del mundo interesados en metodologías innovadoras que integren el componente artístico y emocional en el aula de idiomas.
Vocación
Llegué a la ciencia movido por una inquietud constante: entender los desafíos reales que enfrenta la educación y buscar respuestas que transformen positivamente la práctica docente. Desde mis primeros años como docente, me di cuenta de que muchas de las dificultades que vivíamos en el aula no se resolvían con soluciones genéricas ni con teorías alejadas de la realidad. Fue entonces cuando sentí la necesidad de investigar, de formular preguntas pertinentes sobre los problemas que observaba cada día, y de encontrar caminos que pudieran hacer de la enseñanza un entorno más justo, inclusivo y eficaz.
Investigar se convirtió para mí en una forma de compromiso: con mi alumnado, con la mejora continua y con una visión de la educación como motor de cambio social. No concibo la ciencia como algo abstracto o alejado, sino como una herramienta poderosa para mejorar vidas concretas.
Sigo aquí porque aún hay mucho por hacer. Cada problema educativo es una oportunidad para innovar, para aprender y para construir colectivamente una escuela más humana y transformadora. La ciencia me permite no solo comprender la complejidad del aprendizaje, sino también actuar sobre ella, proponiendo soluciones reales, fundamentadas y sostenibles. Y eso es, sin duda, lo que me motiva cada día.
Deseo científico
Impulsar un modelo de enseñanza de idiomas que combine bienestar emocional, innovación pedagógica y excelencia en los resultados de aprendizaje.