Antonio Arroyo Mateo
IHSM-UMA-CSIC
Dpto. de Microbiología
Grupo de investigación
Microbiología y protección de cultivos
Sobre mí
Mi nombre es Antonio Arroyo Mateo. Nací en Málaga en 1997. Estudié la primaria en el colegio Simón Bolívar y Cortijo Alto. Luego pasé al IES Salvador Rueda donde cursé la ESO y El Bachillerato (de ciencias). Más tarde, accedí al grado en Biología y me gradué por la Universidad de Málaga. Posteriormente me matriculé en el Máster de Biotecnología Avanzada en la misma Universidad y al año siguiente realicé el Máster de Profesorado. Desde hace relativamente poco, soy alumno del Programa de Doctorado de Biotecnología Avanzada y estoy contratado con cargo a proyecto en un grupo de investigación del IHSM- “La Mayora” a la espera de la resolución de las becas FPU (Formación de Profesorado Universitario).
Líneas de investigación
- Virulencia de la bacteria patógena Pseudomonas savastanoi en huéspedes leñosos: de la genómica y la regulación global a la caracterización del secretoma extracelular.
- El secretoma de la bacteria fitopatógena Pseudomonas savastanoi: identificación de nuevas proteínas extracelulares y papel en virulencia durante su interacción con el olivo.
Resultados destacables
He conseguido expresar el regulador transcripcional con el que trabajo en E. Coli
Vocación
Desde bien pequeño he tenido interés por todas las áreas de conocimiento. Sin embargo, decidí acercarme a la ciencia porque pensaba que el método científico era la metodología más eficaz para responder con cierta autoridad a las cuestiones más basales que todos nos hemos planteado y que parecen estar codificadas en la parte más primitiva de nuestro ser. El método científico trata de ordenar una serie de evidencias y darles sentido mediante el uso de la razón, que es uno de los mecanismos ubicuos en seres humanos y que por tanto parece definirnos como grupo. Si bien es cierto que esas evidencias la obtenemos a través de mediciones que interpretamos a través de los sentidos y que estos, podrían estar mostrándonos una mínima parte de la realidad y/o distorsionándola completamente, es más que evidente que los resultados científicos son de utilidad y tenemos pruebas de ello en toda la historia de la ciencia. Por tanto, me interesé en la ciencia por cuestiones meramente filosóficas.
Sin embargo, en bachillerato y en la carrera, comencé a interesarme por la metodología de las investigaciones. Más que el resultado final de una investigación y la consiguiente aportación al conocimiento me comenzó a interesar cómo se planteaban los experimentos, qué soluciones se diseñaban y qué atajos se tomaban para resolver distintas problemáticas. Fui dándome cuenta de que la ciencia es también un arte, un espacio en el que el ingenio y la creatividad son esenciales
Deseo científico
Aportar al conocimiento sobre la enfermedad de la tuberculosis del olivo y diseñar posibles soluciones para mitigar sus efectos perjudiciales.