Mª Ángeles Molina Martínez

Grupo de investigación

Identidad social, bienestar subjetivo y comportamiento social

Sobre mí

Mª Ángeles Molina es Doctora en Psicología por la Universidad Autónoma de Madrid. Ha trabajado coordinando proyectos nacionales e internacionales sobre envejecimiento activo, cuarta edad, plasticidad cognitiva en la vejez, estereotipos sobre las personas mayores y evaluación de programas de aprendizaje a lo largo de la vida. Estos trabajos han dado lugar a diversas publicaciones en revistas de prestigio. Ha sido galardonada con el Premio Pañella Casas, otorgado por la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología. En la convocatoria JAE-DOC 2011 del Consejo Superior de Investigaciones Científicas obtuvo un contrato posdoctoral y desde entonces trabaja en el Instituto de Estudios Sociales Avanzado.

Líneas de investigación

Envejecimiento activo

Resultados destacables

El modo en que envejecemos no es aleatorio; la investigación sobre los factores protectores del declive y el deterioro en la vejez, está produciendo resultados importantes para la comunidad científica, que permiten buscar índices predictivos de las trayectorias de envejecimiento y desarrollar estrategias preventivas de envejecimiento patológico. Además, la identificación de factores de cambio sobre los que poder actuar, que permiten paliar problemas asociados a la edad, convierten a la persona en agente activo de su proceso de envejecimiento. Los resultados de la investigación en vejez y envejecimiento tiene importantes repercusiones en el individuo y sobre la sociedad: al maximizar el tiempo en el que un individuo es funcionalmente eficaz, se logra, desde el punto de vista social, minimizar y aplazar los gastos en cuidados asistenciales y paliativos, y desde el punto de vista del individuo una mejor calidad de vida.

Vocación

La motivación por alcanzar siempre la siguiente meta me llevó al doctorado, máximo grado académico. Sigo trabajando en Ciencia, ¡porque tengo la fortuna de tener todavía contrato!

Deseo científico

Que las buenas ideas que hacen posible el avance en investigación y que contribuyen a mejorar nuestra calidad de vida, no se queden en un cajón por falta de financiación ni por infinidad de zancadillas burocráticas.